El artista Tomas Sarquis pintó un auto para que una de sus obras sea considerada “arte ambulante”. El artista busca, con esta iniciativa, llevar el arte más allá de los espacios tradicionales y convertir la Ciudad en una “galería de arte al aire libre”.

Bajo la premisa de lograr que el arte sea accesible para todos, el artista urbano Tomas Sarquis, porteño, de 30 años, ha creado una impactante obra de arte ambulante que busca cautivar la atención y el disfrute de toda la Ciudad de Buenos Aires. Sarquis ha transformado un automóvil común en un “lienzo en movimiento”, desafiando las convenciones artísticas y llevando su creatividad directamente a las calles porteñas.

Con una visión innovadora y vanguardista, Sarquis decidió utilizar un automóvil como plataforma para su obra. Su objetivo es que las personas de todas las edades y culturas puedan apreciar y disfrutar de su creación, sin necesidad de visitar una galería o un museo. Esta audaz iniciativa busca llevar el arte más allá de los espacios tradicionales y convertir la Ciudad en una “galería de arte al aire libre”.

A diferencia del año pasado, el artista reaparece en este 2023 con una propuesta diferente. Mientras que en 2022 sorprendió a todos con su obra centrada en la pintura corporal, en esta ocasión, mantiene la esencia del arte en movimiento como elemento central. Esta nueva manifestación artística representa una evolución en su visión creativa, demostrando su habilidad para reinventarse mientras sigue explorando el poder del movimiento en su obra.

El vehículo, que en su estado original no destacaba por su atractivo visual, ha sido completamente transformado por la mano creativa de Sarquis. Su estilo único y su enfoque experimental se reflejan en cada trazo que cubre la carrocería. Los dibujos llamativos y su impronta característica capturan la atención de los transeúntes y provocan una variedad de emociones y reacciones.

La idea detrás de esta propuesta artística es que los espacios comunes de la Ciudad de Buenos Aires sean parte de los pasillos de un “Museo al Aire Libre”. A diferencia de las exposiciones tradicionales, donde el público debe visitar un espacio específico, Sarquis busca llevar su arte a lo cotidiano. “Mi idea es que si estás caminando por una avenida, esperando el colectivo o detenido en un semáforo, puedas disfrutar de una pintura, en este caso no en un cuadro sino en un auto en movimiento”, dice el artista.

El mensaje que Sarquis pretende transmitir con su obra es que el arte no tiene fronteras y no debe ser elitista. Mediante la transformación de un objeto común en una obra de arte, demuestra que la belleza y la creatividad pueden encontrarse en cualquier lugar y en cualquier momento. Quien tenga la oportunidad de visualizar la obra de Sarquis podrá identificar con facilidad su característico estilo.

A la hora de comenzar a plasmar su arte en la carrocería del auto, Sarquis no tenía planeado lo que iba a pintar. Lo empezó a hacer sin saber ni cómo ni cuándo iba a terminar. Se dejó llevar por la inspiración, para terminar en una obra que podrá verse deambular por la Ciudad, sin museo ni galería que limite el acceso popular al arte.