Megaoperativo en la Villa 1-11-14
30 Junio 2017
Más de un millar de gendarmes y policías realizaron este viernes casi un centenar de allanamientos en la Villa 1-11-14 del barrio porteño del Bajo Flores, en busca de drogas y talleres clandestinos, informaron fuentes del Ministerio de Seguridad de la Nación. También encontraron un potente material explosivo.
Las fuerzas policiales y de seguridad iniciaron un gigantesco operativo para desbaratar bandas de narcotraficantes y detener a sus integrantes, apresar a delincuentes prófugos de la Justicia refugiados allí y deshacer talleres clandestinos que funcionan en el lugar.
Al menos trece personas, entre ellas dos líderes de la denominada “Banda de los paraguayos”, fueron detenidas durante el operativo. Fuentes de la investigación informaron que se secuestraron también municiones con punta de cerámica, de las conocidas como “mata policías”, y explosivos con mechas y detonadores.
Durante el operativo, iniciado a las 4 de la mañana, se realizaron casi un centenar de allanamientos donde se incautaron alrededor de 450 kilos de marihuana, 50 kilos de cocaína, y 45 mil dosis paco, una granada de guerra, una ametralladora, distintas armas de fuego (entre ellas una pistola .357), una máquina contadora de billetes y dinero.
El jefe de la Policía Federal, comisario general Néstor Roncaglia, aseguró hoy que el detenido capo narco peruano Marco Estrada Gonzáles, conocido como “Marcos”, sigue manejando la venta de droga en la villa 1-11-14, del Bajo Flores porteño. Además de Roncaglia estuvo la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
Por ello, esta mañana era allanada la cárcel de Ezeiza donde se encuentra alojado, al igual que la de mujeres en la que está recluida Silvina Salazar, su esposa, acusada también de liderar la banda.
En declaraciones a la prensa en la villa 1-11-14, Roncaglia reveló que fue arrestada “la suegra de 'Marcos', que ocupó su lugar (en la organización narcocriminal) cuando fueron detenidos junto a su esposa”.
Por otra parte, el jefe de una de las bandas de narcos desbaratada por la Policía Federal y la Gendarmería durante los allanamientos en la villa 1-11-14 tenía en su poder seis panes de un poderoso explosivo listo para ser utilizado.
Según lo transcendido, al sospechoso de nacionalidad paraguaya le secuestraron seis panes de 100 gramos de pentonita cada uno además de detonadores y cordones para activar los explosivos y regular el tiempo de la detonación. Los dispositivos estaban listos para ser activados, con una capacidad de daño muy alta, que incluso se podía duplicar con el uso de amonal.
El hallazgo, en una de las 90 viviendas allanadas, sorprendió a los investigadores debido a que su utilización está reservada para compañías mineras o brigadas de demolición de las fuerzas armadas debido a la estabilidad que posee.
Además esa combinación de pentonita y amonal era muy utilizada por grupos guerrilleros en Colombia.
Se cree que los explosivos iban a ser utilizados en contra de otros narcotraficantes de la zona.