Sin dudas haber pasado por la presidencia del Banco Ciudad, permite que un convenio de esta relevancia entre el ministro Rogelio Frigerio y el presidente del Banco Central Federico Sturzenegger, de la posibilidad de la apertura de cajas de ahorro desde una computadora o dispositivo móvil.

El Gobierno inició un mecanismo para que la apertura de cajas de ahorro pueda realizarse desde computadoras personales y dispositivos móviles, como parte de un proyecto de bancarización que busca garantizarle a la gente acceder a un sistema financiero ágil y rápido.

La modalidad surge de un convenio que firmaron el ministro del Interior, Obras Públicas y Vivienda, Rogelio Frigerio, y el presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), Federico Sturzenegger.

La cartera del Interior, a través del Registro Nacional de las Personas (Renaper), será la encargada de dar el soporte necesario para que las entidades bancarias puedan verificar la identidad de las personas en el proceso de apertura de cuentas.

De esa forma, se garantizarán las mismas posibilidades para todos los ciudadanos, independientemente del lugar donde residan.

“El acuerdo con el BCRA es un paso más que da este Gobierno para seguir acercando servicios a todo el país”, señaló el director del Renaper, Juan José D´Amico.

Aseguró que “son hechos concretos que hacen más fácil la vida a la gente porque ahorran tiempo y achican distancias".

Para poder acceder a este beneficio el interesado deberá descargar la aplicación que el banco le indique, en la cual deberá incluir el número de DNI y una foto selfie.

Inmediatamente esa información será remitida al Renaper para su validación a través del reconocimiento biométrico de rostro, y una vez certificada la identidad, el banco volverá a comunicarse con el ciudadano para finalizar el trámite.

Esa metodología ya se utiliza en países como España, México y Brasil, lugares en los que su implementación ha permitido extender los niveles de bancarización y agilizar los trámites.

El Renaper comenzó a actualizar el registro de los ciudadanos para volcarlos en una base de datos protegida, a través de tecnología con estándares internacionales que permitirá interactuar con otros organismos.