Secuestraron juguetes tóxicos
12 Julio 2019
Fue durante procedimientos realizados en jugueterías del barrio de Once por la División Operaciones Especiales. Los artículos contenían sustancias químicas, que podrían generar alucinaciones a los niños que entraran en contacto con ellos.
En el marco de diez allanamientos realizados en jugueterías mayoristas de Once, la Policía de la Ciudad secuestró en los últimos días más de 5 mil juguetes tóxicos y alucinógenos, los cuales no cumplían con normas básicas de seguridad. La mercadería tenía un valor de venta de más de 1 millón de pesos.
Los procedimientos fueron llevados a cabo por personal de la División Operaciones Especiales de la Policía de la Ciudad, en cooperación con agentes de la Agencia Gubernamental de Control (A.G.C.), la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (C.A.I.J.) y Lealtad Comercial, en diez locales ubicados en la calle Perón, en un radio de dos cuadras entre las alturas 2500 y 2700.
Las distintas inspecciones se iniciaron a raíz de tareas investigativas ordenadas por la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (U.F.E.M.A.), a cargo del Dr. Blas Matías Michienzi, vinculadas a la venta de juguetes fabricados con productos nocivos para la salud.
En total fueron secuestrados 176 bultos que contenían 5.319 juguetes de distinta variedad, los que puestos a la venta alcanzarían un valor de mercado de 1.006.225 pesos.
Dichos productos no cumplían con los requerimientos del rotulado y etiquetado previstos en las normas de seguridad, por lo que tampoco contaban con un proceso de certificación que validara sus componentes químicos, físicos y mecánicos, lo que podría provocar diversos daños a los usuarios, pudiendo causar inclusive problemas oncológicos.
Tras ello, la A.G.C. clausuró tres jugueterías y fueron labradas actas contravencionales a los propietarios de todos los locales inspeccionados, correspondientes al Art. 79 del Código Contravencional (ejercer ilegítimamente una actividad).
A pedido del Magistrado interviniente, los productos incautados serán peritados por la Cámara Argentina del Juguete, y tras ello destruidos.