Fue organizado por el Comité de Seguridad en el Fútbol y llevado a cabo por la Policía de la Ciudad. Hubo más de 65 mil personas presentes en el estadio Monumental.

El operativo de seguridad del partido entre River y Boca culminó con un resultado satisfactorio cuando el plantel de Boca arribó de regreso a la concentración de Ezeiza, y las más de 65 mil personas que acudieron al Monumental salieron del estadio.

El Comité de Seguridad del Fútbol de la Ciudad informó que en el marco del programa Tribuna Segura, la Policía de la Ciudad detuvo a dos hinchas por pedido de captura y se efectuaron 11 restricciones de ingreso al estadio.

Los controles realizados íntegramente por la Policía de la Ciudad contaron con la colaboración de diferentes organismos del Sistema Integral de Seguridad Pública (SISP).

Además, los efectivos apresaron a una persona por atentado y resistencia a la autoridad y demoraron a otro por ofrecer a la venta 8 entradas que eran de “protocolo”. Todos los involucrados fueron puestos a disposición de la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas Nº7, a cargo del Dr. Norberto Brotto.

Adicionalmente se realizaron controles en las inmediaciones del "Monumental" para evitar la presencia de los denominados “trapitos” y el uso indebido del espacio público. En este sentido, cerca de 30 actas contravencionales fueron levantadas a "cuidacoches", mientras que por ingresar pirotecnia, venta en la vía pública o ingreso de materiales prohibidos se labraron otras 154.

Personal de la Secretaría de Transporte realizó controles de alcoholemia, con dos casos positivos, y labraron 154 infracciones de tránsito.

El operativo integral comenzó a las 9 cuando personal de la Agencia Gubernamental de Control efectuó una completa inspección en el "Antonio Vespucio Liberti" para disponer su habilitación, que derivó en el hallazgo y secuestro de bebidas alcohólicas en la confitería del club y en los palcos Belgrano y San Martín. Además, a pedido de la Policía de la Ciudad, el club River Plate fajó y aseguró la Oficina de la Subcomisión del Hincha, en donde se encontraron bombos y redoblantes, entre otros elementos.

También participaron de las inspecciones el cuerpo de Bomberos, representantes de Espacio Público, de Logística, de la Dirección de Tránsito y Transporte, de Limpieza y de la Dirección de Prevención del Delito; y la división de Explosivos de la Policía de la Ciudad revisó todos los rincones del estadio.

En cuanto al traslado del micro, que llevó a los jugadores, cuerpo técnico y dirigentes de Boca Juniors, el mismo fue escoltado por el Grupo de Acción Motorizada (GAM) de la Policía de la Ciudad, desde un hotel del partido bonaerense de Ezeiza hasta el Monumental, donde finalmente arribó cerca de las 15. Tres horas antes había hecho lo propio el ómnibus que llevó a la reserva.

Durante el recorrido del vehículo, que fue reforzado con vidrios antivandálicos, se hicieron a modo de prevención diversos desvíos de tránsito momentáneos.  El trayecto se realizó de la siguiente manera: Dellepiane, Richieri, 25 de Mayo, el Paseo de Bajo, Illia, Sarmiento, Libertador y Lidoro Quinteros para finalmente llegar hasta el estadio.

Los traslados de la delegación de Boca Juniors hacia Núñez y de regreso a la concentración de Ezeiza, fueron monitoreados en tiempo real desde la Sala de Situación de la Policía de la Ciudad, gracias a las brigadas de Exteriores de Video y también controlados desde el aire por los helicópteros del Escuadrón Aéreo.

Como es habitual, tanto en la previa como durante y después del encuentro, se implementó tecnología de última generación, destacánrose los dispositivos de videovigilancia conectados al centro de monitoreo, el Sistema Rápid, el Sistema Aerostático de Vigilancia, el uso de cámaras móviles y de reconocimiento facial en puntos estratégicos.