Durante los últimos días, la Agencia Gubernamental de Control que dirige Ricardo Pedace, realizó un importante operativo en el barrio de Constitución por denuncias de vecinos por la venta de alcohol en diferentes locales. Se decomisaron alimentos en mal estado y se clausuraron dos comercios.

La Agencia Gubernamental de Control trabaja arduamente para garantizar que se cumplan las medidas de higiene y seguridad necesarias en los comercios de las cabeceras ferroviarias e inmediaciones de Ciudad de Buenos Aires, velando por la salud de todos los trabajadores que transitan diariamente.

En los últimos días realizó un importante operativo en el barrio de Constitución por denuncias de vecinos que aseguraban la venta ilegal de alcohol en diferentes locales. En total se inspeccionaron 9 locales de comida y un puesto ambulante, de los cuales se decomisaron 50 Kg de alimentos en mal estado entre hamburguesas, milanesas, empanadas y aderezos, entre otros.

Al respecto, Ricardo Pedace, director Ejecutivo de la AGC, declaró: “Nosotros creemos que cuidar la salud de todos los ciudadanos que transitan la Ciudad es fundamental, por ello, desde la AGC realizamos operativos de manera asidua en los tres principales centros de transbordo de Buenos Aires”.

Como resultado del operativo, fueron clausurados 2 locales, uno por obstruir el procedimiento no permitiendo a los inspectores realizar su trabajo y el otro por vender alcohol ilegalmente. En total se secuestraron 593 litros de esta sustancia.

Cabe aclarar, que según la resolución 629/2012 de la CNRT, se encuentra prohibido el expendio y consumo de bebidas alcohólicas en todo el ámbito de la red ferroviaria nacional. Por ello, los locales que incumplan dicha norma son inmediatamente clausurados.

Participaron la Dirección Nacional de Migraciones y Policía de la Ciudad.

Este operativo se suma a los 8 realizados en el último año, en Once y Plaza Miserere, Constitución y Plaza Constitución y Retiro. En lo que va del año fueron clausurados 10 establecimientos por no cumplir con las medidas de higiene y seguridad necesarias, atentando contra la salud de los vecinos y se decomisaron más de 1070 kgs de alimentos.